Lula cierra filas en Brasil para enfrentar semana clave

El disparo fue directo al blanco y apuntó al corazón del Partido de los Trabajadores (PT) del presidente Lula : la ética, su capital simbólico más preciado.

Un vídeo divulgado por la revista Época, que pertenece al grupo empresarial O Globo, muestra al ex jefe de la asesoría Parlamentaria de la Casa Civil, Waldomiro Diniz, "negociando" dinero para la caja de la campaña electoral de algunos candidatos del PT en el 2002, con uno de los principales dueños del negocio del juego clandestino, conocido como Carlinhos Cachoeira. Como si esto ya no fuera suficientemente grave, también se le puede ver pidiendo un 1% de la "operación" para su propio bolsillo. Un simple y claro caso de soborno.

Esta semana que comenzó no será fácil para Lula y su gobierno. Varios de los imputados en el delito, entre ellos el ex asesor Waldomiro Diniz, tendrán que declarar ante la Policía Federal, que lleva adelante la investigación del caso. En el Planalto prenden velas a los santos para que no surja un nuevo escándalo, y para que estas declaraciones no comprometan más al jefe de gabinete José Dirceu.

Ayer por la tarde declaró Carlinhos Cachoeira, el "empresario" de juego clandestino que grabó la cinta de vídeo "como garantía", pero no dijo nada nuevo, sólo se limitó a corroborar que había dado a conocer la filmación "porque temía por su seguridad". Hoy se espera que comparezca ante la Policía Federal el propio Waldomiro Diniz.

La evaluación de los analistas de distintos medios locales, es que si desde el gobierno logran mantener el control de la situación, en esta semana considerada "crucial", la crisis podría darse por superada.

La denuncia cayó como una bomba, el viernes 13 de febrero, justamente cuando en Río de Janeiro se preparaba la reunión oficial del PT para celebrar un año más de su creación. "No podemos errar, pero no desde el punto de vista administrativo, sino en la política, en la orientación, en el cumplimiento de algunas cosas que son marcas registradas de este partido, que es su comportamiento ético y su rectitud", dijo en su discurso "petista", un Lula empeñado en levantar el ánimo de sus camaradas que estaban visiblemente conmocionados por la denuncia. El llamado a cuidar de la ética ya había sido acompañado por la separación inmediata de Diniz, la "oveja descarriada", a petición del propio Lula, apenas se supo la noticia.

Pero los rápidos reflejos de Lula para apartar al funcionario que tenía su despacho en el Planalto, un piso arriba del presidente, puede que no alcancen para alejar los nubarrones en el cielo del PT.

Es que el 2004 es un año electoral, en donde este partido con base popular, por primera vez en el poder, tiene en la mira consolidar su esquema representativo, y para eso pretende ganar intendencias y retener otras, como la de Sao Paulo, la joya más preciada.

La base aliada del Planalto en el Senado, junto con los líderes del PT en el Congreso, y con el propio Luis Ignacio Lula da Silva, intentan articular estrategias comunes para evitar que "la sangre llegue al río". La tarea fundamental está centrada en frenar a toda costa la formación de la comisión de investigación parlamentaria, porque ven en ella una maniobra política que intenta solamente "sacar del medio" a José Dirceu y hacer tambalear la gobernabilidad.

La preocupación también es evitar que la economía sea contaminada, en un momento en que los números no le sonríen a Brasil. A pesar de que el equipo económico, comandado por el ministro de Economía, Antonio Palocci, consiguió cumplir más que satisfactoriamente el superávit fiscal del 4,25% pautado por el FMI, el Producto Bruto Interno (PBI) se redujo el 0,2% y es el peor desempeño desde 1992.

En el PT temen que la aparición "oportuna" de esta denuncia de corrupción, la primera de importancia que sacude al PT desde que está en el gobierno, sea una muestra de una sorda y cuidadosamente planificada "campaña sucia" contra el PT, según dejaron saber algunos de sus miembros.

El temor está fundado en una pregunta : ¿Por qué aparece esta cinta -entregada anónimamente a un senador de la oposición-, mostrando un claro caso de soborno, justo ahora y no hace dos años atrás cuando fue filmada ?

Una de las hipótesis, la que más alto suena dentro del PT, es que hace dos años atrás no hubiese sido tan efectiva la denuncia, porque la fuerte imagen positiva del entonces candidato Lula no era fácil de eclipsar. La teoría de la conspiración es justificada por un hombre cercano al presidente Lula "Es sucio, pero hace parte del juego. Tenemos que admitirlo".

El presidente del partido, José Genoino apuntó directamente al Partido Social Demócrata Brasileño (PSDB) del ex presidente Fernando Enrique Cardoso : "Es una táctica de sectores del PSDB para traer al 2004 la disputa del 2002. Es una denuncia recalentada", sostuvo. Pero, a medida que el tiempo pasa, aparecen datos que indicarían que Diniz también realizó tráfico de influencias durante el actual gobierno, lo que se transformó en el peor fantasma de estos días para el PT.

Las mayores embestidas de la oposición están dirigidas al hombre fuerte del gobierno, José Dirceu, que es amigo personal de Diniz hace trece años. Peticiones de renuncia del jefe de gabinete y la formación de una comisión parlamentaria de investigación, sólo pudieron ser calmadas, temporalmente por la nunca más oportuna llegada del carnaval (que en Brasil, literalmente, "para" al país durante una semana) y por un golpe de efecto de Lula : firmó un decreto, el día 20, por el cual prohíbe el funcionamiento de bingos y las máquinas "traga monedas" en todo el país.

La medida que afectaría también los negocios de Cachoeira, está basada en las sospechas de que el dinero usado en esas actividades está relacionado con el lavado de dinero del narcotráfico. Una decisión polémica pero que en cierto modo desvió las miradas y descomprimió la situación de Dirceu.